La estrella de Hollywood John Travolta y su esposa, la también actriz Kelly Preston, ofrecieron ayer un servicio religioso privado en memoria de su hijo Jett, en la mansión que ambos comparten en Ocala, en el centro del estado de Florida (EE.UU.).
El servicio fúnebre fue realizado siguiendo la costumbre de la cientología, a la que la pareja pertenece y que se enfoca en la celebración de la vida pasada y futura del difunto.
Jett Travolta, de 16 años, murió por las complicaciones derivadas de una rara enfermedad, el mal de Kawasaki, que afecta el sistema vascular y el corazón, cuando la familia se encontraba de vacaciones en Bahamas, el pasado 2 de enero.
Sus restos fueron cremados y sus cenizas llevadas a la pequeña comunidad de Anthony, en el norte de Ocala, donde Travolta reside junto a su familia desde hace seis años.
En un comunicado publicado a través de su sitio en Internet, John Travolta y su esposa Kelly Preston dijeron tener el "corazón roto" por la pérdida de su hijo mayor, al tiempo que expresaron su dolor por haberlo tenido con ellos "por tan poco tiempo".
0 comentarios:
Publicar un comentario