La venta de Chevron y el fantasma de la desocupación

La venta de la empresa amenaza a la concertación petrolera impulsada por el gobernador Daniel Peralta que protege los puestos trabajo hasta mayo. Incertidumbre de los trabajadores. Oxy puede ser una de las compradoras.

El Sindicato del Petróleo y Gas Privado de Santa Cruz, la Cámara que agrupa a las petroleras y el gobierno de Santa Cruz firmaron un acuerdo donde garantizan hasta mayo los puestos de trabajo de los empleados de la petrolera Chevron Texaco a cambio de no solicitar aumentos salariales. Ahora, la empresa puso en venta sus activos de la Cuenca Austral, donde tiene nueve concesiones repartidas entre la provincia y Tierra del Fuego y otras cuatro de Neuquén, y hace peligrar los puestos de trabajo.

Chevron es una de las mayores petroleras estadounidense y la principal de ese país en la Argentina, donde ocupa el tercer lugar en el ránking con el 8% de la producción detrás de Repsol y Pan American Energy. La venta de sus activos amenaza a la "Concertación Petrolera", impulsada por el gobernador Daniel Peralta, por la directiva de las casas matrices de renegociar los contratos con las operadoras de servicios petroleros.
Para Luis Cárdenas, responsable del Sindicato, una solución podría ser el ingreso de OXY a quien visualiza como una de las empresas de mayor nivel de inversión, lo que permitiría mantener los acuerdos alcanzados en diciembre.
OXY -conocida en el mundo como Occidental Petroleum- es una de las denominadas siete hermanas y la tercera en producción en los Estados Unidos. En Santa Cruz se quedó con Vintage y su nombre quedó asociado con la promesa de invertir mil millones de dólares al entonces presidente Néstor Kirchner. Su operador principal es Daniel Lalín, ex presidente de Racing Club, la camiseta que desvela a K.
La zona sur de Santa Cruz concentra 1200 trabajadores del gas y petróleo y otros 300 de UOCRA, asimilados a la actividad. Las luces de alerta temprana se encendieron con la caída de un contrato de Natura Energy y el despido de 15 trabajadores que lograron ser reubicados, pero ni Petroleros Privados ni la UOCRA controlan la situación que volverá a ser analizada el próximo 29 de enero con las otras patas del acuerdo