Pamela Anderson se encontraba en París, presentado la nueva colección 2009-2010 de la diseñadora Vivienne Westwood, quien según dijo tuvo en la ex chica Baywatch a su “musa inspiradora”.
Al finalizar el desfile y cuando ambas salían a saludar al público, Pammy decidió dejar al aire sus encantos personales que tanto bien le hicieron a la humanidad, sin esconder las cicatrices que dejaron las operaciones de implantes.
Vivienne afirmó que para sus desfiles prefiere mujeres de figuras más voluptuosa, y no esqueléticas modelos. “Lo que importa es la actitud”, dijo la codiseñadora Andrea Kronthaler, y al parecer a Pamela le sobra.