El fallecimiento de la Senadora Judith Fortsman sacudió la estantería política de Santa Cruz, al punto que en la reunión de El Calafate este fin de semana, no pudo depurarse - como estaba previsto - el armado final de las candidaturas, aunque en líneas generales hay una idea de la “ingeniería” montada por Néstor Kirchner tendiente a desarticular los más arriesgados pronósticos de los aventureros que trenzan a un Puricelli por aquí, a un Cotillo por allá, a Martínez Crespo, Córdoba o Bianchi en una madeja infinita de un ovillo cuya única punta ya sabemos quién la tiene en su mano.
Pero la tragedia de la Senadora trajo un aditamento extra al contexto político de la provincia, lo cual se debatió largamente en el encierro de Los Sauces esta semana; sucede que la banca del Senado queda literalmente vacía, pues la infortunada legisladora era el segundo relevo, (tercera y última en la lista sucesoria) de Alicia Kirchner que en el 2007 hizo campaña, sabiendo de antemano que de ganar iba a dejar su banca para volver a Desarrollo Social. Lo más preocupante fue, no que Alicia se postulara sabiendo que no iba a asumir, sino que la gente la votara sabiendo que lo iba a hacer.
En aquel momento el relevo natural de Alicia era el ex diputado provincial Jorge Banicevic, sin embargo desde el FPVS no le permitieron asumir sosteniendo que se debía respetar el cupo femenino; ergo, asumió la Sra Judith Fortsman.
Hoy, ante la ausencia física de la legisladora, la banca quedó acéfala y de acuerdo a las expresiones del propio Dr. Vanosi, Constitucionalista, ante la coyuntura debe llamarse a elecciones para ocupar el cargo vacante.
La corriente contraria a este postulado interpreta que la banca corresponde al partido y que por esta razón la Justicia podría ordenar la elección de un candidato surgido de un Congreso partidario para que concluya los dos años de mandato que aún restan.
El entorno político de El Calafate teje numerosas elucubraciones para condimentar la ensalada política que hay en Santa Cruz y mientras algunos creen que Kirchner plantea una campaña distractiva y hasta se podría largar como candidato a diputado por nuestra provincia, otros sumaron a esta afiebrada hipótesis, que el ex presidente buscaría ocupar la banca en la senaduría por Santa Cruz, ya sea, en una nueva elección, como lo plantea Vanossi, o por “elección” del propio Partido.
En Buenos Aires Kirchner no tiene seguridad de ganar como candidato con Scioli, o al menos no tiene la seguridad de ganar cómodamente. Esto, sumado a la inestabilidad emocional de los Intendentes del conurbano que amenazan con darle la espalda al PIPMA (proyecto de inmolación política masiva), lo pone muy nervioso a Kirchner y posiblemente, como ya piensan algunos en Santa Cruz, el fundador del FPVS vea en la banca desierta del Senado, una tabla de salvación que le permita desertar de la postulación en Buenos Aires, sin tener que renunciar.
Sin embargo habría un problema técnico y hasta si se quiere ético; cuando Banicevic quiso asumir la banca de Alicia, hacia afuera el oficialismo argumentó que no era posible porque “debía respetarse el cupo femenino”. Todos saben que el ex diputado de 28 de Noviembre quería quedarse en el sillón de la Cámara Alta y que no se fue muy contento cuando lo obligaron a renunciar para que asumiera Fortsman.
Si el cupo femenino sigue vigente, obvio es que ningún candidato varón pueda presentarse a una elección para el cargo, por lo tanto la teoría de una posible candidatura de Néstor Kirchner, quedaría descartada.
En las últimas horas se conoció concretamente que el Gobernador Peralta confirmó públicamente en El Calafate, que él no encabezará la lista de diputados nacionales en los próximos comicios legislativos.
Esto puede leerse como una decisión personal que de alguna manera agrieta la relación con el ex presidente, o como la posibilidad de que ese lugar en la lista esté siendo reservado para un hombre que por el momento no es visible, pero que evidentemente está pidiendo pista en Santa Cruz.