El sacerdote José María Di Paola, uno de los 19 firmantes del documento que alertaba que la droga en las villas estaba "despenalizada de hecho", confirmó que recibió el lunes último una amenaza "de muerte" y que le advirtieron que debía irse de la villa 21, donde está a cargo de la parroquia Nuestra Señora de Caacupé.
"Rajá de acá o vas a ser boleta. Una vez que esto deje de ser tema en la televisión vas a ser boleta, ya te la tienen jurada", reveló el padre "Pepe" que le dijo un hombre que lo cruzó el lunes a la noche en una oscura calle de Parque Patricios.
"Sólo tengo en mi cabeza seguir trabajando por la gente de la villa. Esto no es lo cotidiano, por eso tomaremos ciertas precauciones, pero seguiremos una vida normal", indicó el padre en una conferencia de prensa.
Di Paola consideró que el "tema" al que se refirió la persona que le propinó la amenaza era al documento en que el pasado viernes 3 habían advertido públicamente que el consumo de drogas en las villas "ya está despenalizado" y está destruyendo a los jóvenes.
En ese sentido, se había explicado que si la Corte Suprema seguía adelante con este proyecto la situación "se propagará a otros sectores de la sociedad".
El documento fue firmado por 19 sacerdotes que viven en las distintas villas de emergencia de la Ciudad de Buenos Aires y el conurbano bonaerense, doce de los cuales son allegados al cardenal Jorge Bergoglio, quien ayer dio a conocer la amenaza.
