Por lo menos 21 personas murieron el viernes por la madrugada en el este de Afganistán cuando dos terremotos derribaron las casas de adobe donde dormían los pobladores.
Los sismos se sintieron en cuatro aldeas en las montañas de la provincia oriental de Nangarhar, a unos 50 kilómetros (30 millas) de la frontera paquistaní.
Shafiqullah, del pueblo de Bhezad Kheil, dijo que 21 víctimas fueron enterradas en un cementerio local, incluyendo dos niños vecinos. Dijo que Nijad, de 10 años, y Sima, de 7, murieron cuando se desplomó el techo sobre su dormitorio de un segundo piso.
“Hubo dos temblores”, agregó Shafiqullah, de 30 años. “El primero fue muy intenso, cuando todos dormían. Destruyó todo. Después empezaron los llantos y los gritos”.
Los terremotos destruyeron o dañaron un centenar de casas en las cuatro aldeas en el distrito de Sherzad, a 80 kilómetros (50 millas) al este de Kabul, dijo el vocero del gobernador Ahmad Zia Abdulzai