
El depuesto presidente de Honduras, Manuel Zelaya, anunció que el jueves comenzará a
organizar en la frontera nicaragüense un "ejército popular y pacífico" con hondureños leales, para tratar de regresar a su país a revertir el golpe de Estado que lo sacó del poder hace un
mes.
Los entrenamientos se realizarán en fincas que el depuesto gobernante está buscando en las afueras de Ocotal, para intentar un tercer retorno en los próximos días, con el apoyo de la comunidad internacional.
Zelaya, quien fue desplazado del poder el pasado 28 de junio, instaló en Ocotal su base de operaciones con el consentimiento -según dijo- del presidente nicaragüense, Daniel Ortega.
Afirmó que permanece en Nicaragua en calidad de "huésped" del presidente Ortega, quien le aseguró que no hiciera caso a la oposición política nicaragüense que lo acusa de violar la soberanía con su presencia en la frontera.