Con un precio record por metro cuadrado, el Estado edifica viviendas para empleados de YCRT con material de fibra plástica a más del doble del valor en plaza de la construcción húmeda de 1º categoría. Como si esto fuera poco Juan Manuel Campillo, antes de batirse en retirada le adjudicó la obra a Gancedo S.A, firma sospechada de corrupción y de acuerdo a información de medios nacionales, vinculada a Juan Carlos Kirchner, primo del ex presidente.De acuerdo a lo licitado por el Instituto de la Vivienda de Santa Cruz, que hace pocos días cambió a su Presidente, el Estado proyecta la construcción de 36 viviendas prefabricadas (Fase II) por un total de $ 13.997.906,10, lo que lleva el costo de cada unidad habitacional a un récord para este tipo de construcción de 388.000 pesos.
Sin embargo lo mejor está por venir, porque esas viviendas lejos de estar levantadas con ladrillos y cemento, están hechas con material en seco. Las paredes son armadas con placas de fibra plásticas que se cortan y encastran entre sí y se apoyan en columnas de hierro cementadas en la platea; luego se le efectúa una especie de encadenado de material, razón por lo cual permanecen estaqueadas con largueros (como muestra la foto) hasta que se coloca el techo sobre la estructura metálica.
Con estas mismas características se construye en este momento la primera etapa de las viviendas de YCRT a cargo de la empresa Edeco S.A. sobre calle Alberdi y Catamarca, también en esta capital, cuyas imágenes ilustran esta nota. En el caso de las 36 casas que actualmente se encuentran en ejecución la empresa ganó con un presupuesto de $ 13.294.479,10; es decir que en este caso resultaron un poco más baratas; costaron $ 369.000 por unidad lo que lleva el precio del metro cuadrado a $ 7.687,00, lo que podría decirse toda una ganga.
Caras y no la mejor
De acuerdo a la Resolución Nº 2217 del 28 de julio de 2009 Expte IDUV Nº 052.096/2009, se adjudicó la Licitación Pública Nº 15/2009 a la empresa constructora Juan Felipe Gancedo S.A. la construcción de 36 viviendas para el personal de YCRT (Yacimientos Carboníferos de Río Turbio) en la ciudad de Río Gallegos por $ 13.997.906,10, constituyéndose – de esta manera – en uno de las últimas adjudicaciones firmadas por el ex Ministro de Economía Juan Manuel Campillo a obras provenientes de Nación, previa a su obra póstuma frente al palacio de Hacienda, la firma de los 38 millones de pesos a Gotti Hnos para “movimiento de suelos”, en el Barrio San Benito de esta misma capital, lo que (coincidentemente) le llega a la empresa en el momento en que debe levantar una deuda con la AFIP de algo más de 30 millones, como producto de las facturas apócrifas que emitió y por las cuales (obviamente) nadie irá preso ni responderá ante la justicia.
Sin embargo volviendo al tema que es motivo de nuestra investigación, digamos que los valores facturados por la licitación de las 36 viviendas, están sobrepasando en al menos un 165% al tipo de construcción húmeda normalmente utilizada por el IDUV, tomando como base que una casa de tales dimensiones (48m2) y en esa categoría, totalmente terminada, ronda entre los $ 125.000 a 145.000, de acuerdo a las fuentes inmobiliarias consultadas.
Mientras el Estado en Santa Cruz paga $ 8.083,00 (2.099 dólares) el metro cuadrado de construcción prefabricada, en Río Gallegos una constructora privada nos informó que el valor llave en mano de una casa con materiales (húmedos) de primera categoría ronda los 1.400 dólares, es decir $ 5.390,00 el m2, aproximadamente y el de una prefabricada lista para habitar oscila entre los $ 2.800 a los $ 4.700,00 dependiendo de la utilización de material, en este último caso, de primerísimo nivel.
Comparándonos con el país
Con estos valores, a los cuales habrá que sumarle las ampliaciones que las empresas solicitan por “mayores costos”, la obra pública de Santa Cruz ingresa al tope de las más caras en el país, incluso por sobre la obra privada de la provincia de Córdoba que de acuerdo al Boletín El Informativo Inmobiliario, es el estado más caro para construir en el ámbito privado con alrededor de 1.600 dólares por m2 de construcción de 1º categoría.
Precisamente este reporte Inmobiliario señala como máximo costo para el metro cuadrado de construcción “clase A” en las ciudades argentinas (excepto las patagónicas-sur) los siguientes valores:
Córdoba 1.600
Bariloche 1.450
Corrientes 1.300
Formosa 1.150
La Plata 1.500
Mar del Plata 1.600
Mendoza 1.300
Posadas 1.300
Resistencia 1.200
Rosario 1.400
Salta 1.350
San Juan 1.200
Santa fe 1.400
Viedma 1.350
Obsérvese que mientras los valores precedentes corresponden a construcción privada de 1º clase, en Santa Cruz el Estado paga por la obra pública que utiliza la modalidad prefabricada la suma de 2.099 dólares por metro cuadrado.
Los antecedentes
No es un dato menor el de la empresa a la que el IDUV le adjudicó las obras, puesto que Juan Felipe Gancedo S.A. es una de las 12 firmas que cayó bajo la sospecha que regó por el país el caso Skanka y quedó bajo sospecha de una facturación apócrifa superior a los 3 millones de pesos.
Gancedo es una constructora de Viedma (R.N) de bajo perfil hasta que a finales de los 90 llegó a Santa Cruz y estrechó lazos con Néstor Kirchner. La prensa nacional señala que hay una fuerte vinculación entre esta empresa y Carlos Santiago, primo de ex presidente, propietario de la pinturería “PinKar” de Río Gallegos, negocio que suele ganar la mayoría de las licitaciones como proveedora del Estado.
Se dice que cuando Carlos Santiago Kirchner estuvo a cargo del IDUV, entre 2003 y 2005, Gancedo S.A. fue beneficiada con la mayor cantidad de contratos por parte del Estado.
En Río Negro donde actúa la constructora está denunciada por sobreprecios de 130% en la obra pública, más precisamente en el enripiado de la ruta Nº 23 entre Los Menucos y Maquinchao, monto que inicialmente era de 39 millones de pesos y que después de un año se elevó a $ 89.700.000
La connivencia entre esta constructora y Vialidad Nacional o el Instituto para la Vivienda de Santa Cruz, es apuntada desde distintos medios nacionales y consta en diferentes denuncias formuladas por el ARI. Sin embargo, a pesar de todo, Gancedo S.A. sigue ganando licitaciones en esta provincia y le asignan construcciones de obras (como ésta de YCRT) sobrevaluadas, sin que de ningún estamento público se eleve una voz, una queja, sin que a ningún Fiscal le llame la atención y tome participación de oficio y sin que el Tribunal de Cuentas de la provincia objete una coma a lo que pasa por el Instituto de la Vivienda (IDUV) como si se tratara de una cartera paralela en la cual nadie debe interesarse porque tiene vida propia.
Vamos a repetir lo que dijimos en la introducción: la asignación de 38 millones de pesos para “movimientos de suelos” en el Barrio San Benito a Gotti Hnos y la primera licitación para Edeco para casas prefabricadas de YCF (Fase I) y esta última licitación para la construcción de 36 casas (Fase II) a un valor de 388 mil pesos por unidad, fueron las últimas firmas (conocidas hasta hoy) que estampó Juan Manuel Campillo antes de presentar su renuncia y migrar a nivel nacional donde ocupará algún cargo que lo va a alejar de la responsabilidad que nadie en Santa Cruz se atrevió a pedirle: que rinda cuentas.
¿El IDUV hoy?, bien, gracias.
