
Los números no le cierran al juez federal Norberto Oyarbide, quien investiga al matrimonio presidencial por presunto enriquecimiento ilícito a partir del requerimiento de instrucción que presentó el fiscal Eduardo Taiano. Y para ese problema ya tiene una posible solución: citar a declarar a Víctor Alejandro Manzanares, el contador del matrimonio presidencial.
No es la primera vez que Manzanares tiene que dar explicaciones a la Justicia, pero sí sería la primera vez en la que se lo interrogaría directamente por su participación en la elaboración de los números K.
En 2008, el contador del matrimonio presentó un escrito explicando las “variaciones patrimoniales del año 2005 al año 2007”. Sin embargo, para el entonces fiscal de Investigaciones Administrativas Manuel Garrido era necesario “investigar más”, porque el documento presentado por Manzanares no contaba con “la documentación respaldatoria”.
“Polo”, como conocen a Manzanares en las frías calles de Río Gallegos, heredó los números kirchneristas de su padre, Victoriano Manzanares, otro reconocido contador que conoció a Kirchner en la época de los 70, cuando el ex presidente operaba para la ex financiera Finsud. Algunos memoriosos recuerdan que Victoriano fue cliente del estudio jurídico de Kirchner en un proceso que se le inició por algunas irregularidades de Finsud. Néstor no lo pudo salvar y el contador terminó procesado.