
El 17 de agosto del 2007, el ex ministro Daniel Varizat, quien fuera el funcionario más resistido durante el conflicto docente que se extendió por más de 3 meses en Santa Cruz, atropelló con su camioneta 4x4 a más de 20 manifestantes que intentaron escarcharlo, mientras realizaban una movilización pidiendo mejoras salariales. Al mismo tiempo, y a sólo pocas cuadras del increíble suceso -acontecido en San Martín casi Zapiola- un acto partidario se desarrollaba en el Boxing Club: la actual Presidenta lanzaba en nuestra ciudad su candidatura.
En el Día de los Inocentes, aquel 28 de diciembre del año pasado, Varizat fue condenado a 3 años de prisión en suspenso. Su sentencia no sigue firme.
Ese día
“Ese día no era un movilización más. Tenía su sentido porque sentía que había una provocación, ya que habían traído gente para la campaña presindecial. Sentía que era una burla” dijo Alejandra Quillahuilque, docente que aquella noche tenía 33 años.
“Sentí el movimiento de la gente, se me cae uno adelante. Fue un efecto dominó. La camioneta me pasa por encima. Me pasó dos veces por encima. La primera vez, yo trato de salir, porque me pasa cuando estaba de espaldas. Yo me doy vuelta me pongo de panza, no pude salir de ninguna manera y me vuelve a pasar la camioneta y me rompe las costillas. Luego todo el caos, los gritos y llantos. Mi desesperación era porque no podía respirar”, relató.
Las secuelas del atropello en su cuerpo por parte de “este fulano”, -modo en el que se refirió a Varizat- fueron cuatro costillas rotas y la inflamación de uno de sus pulmones que según contó “por suerte no se perforó”.
“Hay mucho esfuerzo que no puedo hacer”. Incluso Quillahuilque advirtió, que debió contar con asistencia kinesiológica para poder recuperar la capacidad respiratoria.
“Cada quien lo pudo sobrellevar en su vida de distintas maneras. Yo pude continuar trabajando sin ningún tipo de problemas. Mi cabeza siguió funcionando con mi trabajo, con mi familia y gente”, agregó.
A pesar de esto “yo lo perdoné”, aclaró. “Ya está. Puedo continuar con mi vida y que ojalá viva muchos años, porque a veces la vida también es un desgracia”, finalizó.
Fallido
El fallo del Tribunal Oral fue dividido. Marta Dávila y María de los Angeles Mercau, resolvieron la pena que se le impuso al ex Ministro de Gobierno de la provincia, mientras su par Jorge Chávez votó por la absolución, por considerar que actuó “en legítima defensa”.
Mercau y Dávila dijeron que la maniobra de avance de la camioneta 4x4 y el modo “en que se ejecutó fueron voluntarias”, basándose en las pericias realizadas al vehículo.
También consideraron que “no se presenció ninguna forma de inimputabilidad" y descartaron que Varizat haya padecido un "trastorno mental transitorio”, como había descripto el perito de parte, Linares.
"Tuvo pleno gobierno de sus acciones con orden valorativo", apuntaron al sostener que luego del hecho -el por entonces funcionario- se dirigió a un hotel, llamó a su familia y se dirigió a la policía.
Indicaron que “Daniel Varizat no padeció ninguna circunstancia que no le hiciera comprender la acción de sus actos” y añadieron, que esa situación de protesta “no lo habilitaba para lanzarse hacia un indeterminado grupo de personas”.
Mercau y Dávila argumentaron que Varizat “pudo pedir intervención policial o por intermedio de sus acompañantes” y que la legítima defensa “no autoriza que pueda ser ejercida de cualquier modo y menos contra mujeres y niños”.
En tanto, Chávez señaló que el ex Ministro “estuvo impedido de circular con el vehículo” y “hubo una expresión abusiva del derecho a manifestarse”. “Varizat no tuvo alternativa”, argumentó el ahora ex juez.
El fiscal Ricardo Camutti, quien había solicitado cinco años de prisión, afirmó que “el fallo no es definitivo, ya que está la posibilidad de interponer recursos”.
En tanto, el abogado querellante Andrés Vivanco sostuvo que el fallo lo sorprende “porque creía que el voto mayoritario iba a ser el de Chávez”.
Dijo no compartir “la calificación jurídica de concurso ideal, porque no es lo mismo atropellar a una persona que a veinte”. “No estamos conformes ni con el modo de cumplimiento de la condena, por lo menos esperábamos un año de cumplimiento efectivo”. “Mandarlo al psicólogo me parece un chiste y que no haya inhabilitación para conducir me parece otro chiste”, apuntó.
“El juicio es nulo y lo planteamos con anterioridad al Tribunal Superior de Justicia. No nos dejaron pedir pena ni nos dejan apelar esta sentencia”, expresó.
El acto
Hoy a las 15:00, se recordará aquel día con un acto en calle San Martín, casi Zapiola, donde ocurrió el hecho.
La iniciativa surge por parte de la Agrupación Solidaridad Obrera, que desde el mediodía comenzará la jornada con una exposición de murales y fotos.
Es por eso que invitan a reafirmar “el compromiso de lucha” y convocan a los trabajadores, estudiantes y comunidad en general para participar de las actividades que se programaron para no olvidar.
“A la impunidad la garantiza el olvido”, destacan en el volante que se reparte por las calles de Río Gallegos..