Los legisladores aprobaron por 52 votos positivos del oficialismo y el radicalismo, y 11 abstenciones del justicialismo disidente y otros opositores, el proyecto que había sido aprobado por la Cámara de Diputados en la última sesión anterior a los comicios del 28 de junio.
Los senadores elogiaron la recuperación de la ahora denominada Fábrica Argentina de Aviones Brigadier Juan Ignacio San Martín S.A., que mantiene una planta de 1050 trabajadores, y confiaron que con dirección estatal pueda reiniciar un desarrollo tecnológico de envergadura.
El convenio firmado por el Ministerio de Defensa y la empresa norteamericana establece que el Estado comprará las acciones a un precio que surge de la diferencia entre activos y pasivos, luego una evaluación de contabilidad supervisada por la Auditoría General de la Nación.
Existe una promesa por parte del Estado para mantener los puestos de trabajo y el desarrollo de una alianza con la brasileña Embraer para la fabricación, a nivel local, de partes inherentes a los modelos 170 y 190 que realiza la firma del país vecino.
Nilda Garré, ministra de Defensa, había adelantado que la intención es potenciar el avión Pampa, para que deje de utilizarse como unidad de entrenamiento y pase a ser un arma de ataque. Además, aseguró que se han preparado ocho proyectos para llevar adelante cuando se asuma la conducción de la fábrica.