
Casualmente una hora después de que la oposición propusiera -durante una conferencia de prensa conjunta que ofrecieron en el edificio anexo de la Cámara baja- despenalizar el delito de calumnias e injurias, y en pleno debate por la ley de control de medios, Cristina de Kirchner anunció por cadena nacional que enviará al Congreso una iniciativa similar.
Cabe destacar que este es un reclamo que tiene larga data. De hecho, Horacio Verbitsky venía hablando de ello desde hace tiempo y el Centro de Estudios Legales y Sociales (CELS), que él preside, había presentado en marzo pasado un proyecto de ley que preveía la despenalización de las figuras de calumnias e injurias para las expresiones sobre temas de interés público.
Pero, sobre todo, esta iniciativa del Gobierno podría interpretarse como un intento oficial de agradar y atraer a los periodistas que no pertenecen a los multimedios, en medio de la dura pelea que mantiene con Clarín.
"Prefiero mil millones de mentiras antes que ser la responsable de cerrar la boca de alguien. Esta es la forma en que entiendo la libertad democrática", dijo Cristina de Kirchner al encabezar un acto de homenaje a los miembros de la Comisión Interamericana de Derechos Humanos (CIDH), con motivo de conmemorarse el 30 aniversario de su histórica visita al país en 1979.
"Quiero de esta manera, garantizar aún más [la libertad], -y repitió- aún más, porque dudo que haya habido alguna etapa en la vida institucional de este país en la que se haya podido hablar con mayor libertad que en la etapa que me ha tocado a mí en la República Argentina", subrayó, en el acto que se desarrolló en el Espacio para la Promoción y Defensa de los Derechos Humanos (ex ESMA), en el barrio de Núñez.
"Desafío a cualquier archivo, a cualquier memoria, a cualquier prueba, de que no ha habido mayor libertad para hablar de las autoridades en este Gobierno", insistió.
# Cristina continúa con el abuso de la cadena nacional
Según el artículo 72 de la Ley de Radiodifusión: “La cadena nacional debe usarse ante casos de urgencia y a requerimiento de la Secretaría de Medios de Comunicación”.
Pero Cristina de Kirchner abusa de la cadena nacional, para “copar” el aire sin interrupciones ni interpretaciones periodísticas que puedan sobreexponerse a las palabras presidenciales .